Julia, madre de John Lennon acude a «Mendips», la casa de su hermana Mary «Mimi» Smith y su esposo George, a visitar a su hijo John, como se había vuelto usual desde que ambos asumieron su crianza en 1946.
John se había mudado con sus tíos a 251 Menlove Avenue, Liverpool pero, ya algo mayor, compartía muchas cosas con su madre, comenzando por el gusto musical. Su mamá le había regalado su primera guitarra Gallotone Champion el año anterior.
Este día, John no estaba en casa. Julia lo pasó con Mimi y esa noche al irse, Nigel Whalley llegó preguntando por John. Si bien tampoco logró verlo, acompañó a la mamá de su amigo hasta en frente del paradero de buses. Se despidió de Julia a quien dejó cruzando la calle. Nigel camina por la calle Vale donde vivía, cuando oye el chirrido de unos frenos, al voltear ve a Julia volando por el aire. Había sido arrollada por un automóvil Standard Vanguard manejado por el policía Eric Clague de 24 años, quien estaba fuera de servicio. Si bien no estaba borracho ni iba a velocidad, Clague no tenía licencia de conducir. Julia se fracturó el cráneo y murió instantáneamente.
Nigel corrió a casa a avisar a Mimi sobre lo sucedido. Mimi, desesperada esperó junto a su hermana por una ambulancia, la llevaron al Hospital General Sefton, pero no había nada que hacer.
John Dykins, entonces esposo de Julia, recogió a John y fueron hacia el hospital en un taxi. John se enteró de lo sucedido pero no quiso ver a su madre. Se recluyó por mucho tiempo tras lo sucedido.
Eric Clague se adjudicó toda la responsabilidad en el parte. Declaró «Soy un Policía Constable 126 C, de la ciudad de Liverpool y vivo en el #43 de Ramilies Road, Liverpool 18. Fui el conductor del automóvil privado LKF 630, envuelto en esta ocurrencia. He oído la declaración del Inspector de Policía Harte y estoy de acuerdo.«
Tiempo después, Clague contaría lo horrible que fue enterarse que John Lennon era quien era, y que esto lo convertía en el asesino de su madre. En 1998, Eric Clague declaró «La Señora Lennon corrió frente a mi, no me dio tiempo de evitarla. No estaba yendo a velocidad, lo juro. Fue solo una de esas cosas horribles que suceden. Al tiempo pensé en enviarle mis condolencias a la familia, pero pensé que sólo haría las cosas peores. Estaban naturalmente molestos por todo lo sucedido.«, Clague se retiró de la policía de inmediato para convertirse en cartero. Le fue asignada la calle donde vivía Paul McCartney, por lo que a diario debía llevarle cientos de cartas de las fans. El fantasma de lo ocurrido jamás dejó de perseguirlo.