Paul McCartney contacta al genio de la ciencia ficción para compartirle una idea futurista: Se trata de una película musical de ciencia ficción donde una banda de rock descubre que un grupo de extraterrestres ha robado sus identidades. La idea, que incluso contaba con un pequeño guión hecho por McCartney, era que la banda fueran Los Wings.
Asimov, quien no era muy fanático del rock, se interesó por el proyecto y empezó a trabajar un brief para plantear la historia. Añadió algunos otros toques a la idea de McCartney, deshechó su guión y le dio un aire más dramático que de musical: en su relato, unos parásitos de energía llegaban a este mundo para tomar cuerpos de personas.
Luego de presentar el manuscrito a McCartney, este lo rechazó. La idea nunca llegó a ejecutarse y el manuscrito aún existe entre los archivos de la Universidad de Boston. Hay quienes consideran que el proyecto fue retomado por Daft Punk, quienes aplican todo el concepto en su disco Discovery y la banda ficticia «Interstella 5555», cuyas animaciones estarían inspiradas en la idea de McCartney.