Una mujer de 27 años llamada Cristin Keleher irrumpe en la casa de George Harrison en Maui, Hawaii adquirida en los 80s. La mujer toma una pizza del refrigerador, la calienta, toma una gaseosa y llama a su madre en New Jersey. Ni George ni Olivia se encuentran presentes. Una alarma se activa, la policía llega en breve, y se encuentra a Keleher lavando su ropa. Su explicación fue «Pensé que tenía una conexión psíquica con George«, asegurando que había entrado a la casa a través de un portal de cristal…
Maui, Hawaii