Ringo Starr confesó a ‘Contact Music’ que temió perder su puesto en la banda de Liverpool, cuando descubrió que el bajista del grupo, Paul McCartney, aprovechaba cualquier momento para sentarse en el instrumento.
Sin embargo, los miedos de Ringo (67) sobre los intentos de McCartney de robarle el puesto se diluyeron al oírle tocar los platos. “Es un bajista increíble, pero no es un gran batería, ni la mitad de bueno que yo“.
“Cada vez que me iba a por una taza de té, él se sentaba en la batería. No podías levantar el culo“, asegura Ringo Starr, que confiesa que en un momento dado pensó que Paul McCartney quería robarle el puesto de batería en los Beatles. “No lo hacía cuando yo estaba en el cuarto. Creo que si me hubiera ido o si hubiera pasado algo, él habría tocado la batería“, explica Ringo, quien esta semana lanzará al mercado “Liverpool 8”, su disco #14.
Ringo considera que en los Beatles cada uno tenía su rol y su instrumento y que ninguno podría haber hecho su trabajo. “George Harrison tenía su forma de tocar la batería, también John Lennon. Los aporreaban un poco, pero no sabían tocarla de verdad“, asegura Ringo, que recuerda que McCartney llegó a grabar la batería en ‘Back in the USSR’, ‘Dear Prudence’ y ‘The Ballard of John and Yoko’.
Solamente tocó la batería en la balada de John y Yoko.