Paul McCartney y Heather Mills, en pleno trámite de separación, dejaron a un lado sus diferencias por el divorcio este día, para celebrar en paz el tercer cumpleaños de su hija, Beatrice, en un parque infantil.
La mayoría de los periódicos presentaron fotos de la pareja rodeados de sus colaboradores guardando una «distancia de seguridad», así como las de la pequeña Beatrice disfrutando su cumpleaños con sus amiguitos en un jardín de la localidad de Hastings (sur de Inglaterra).
Pero aunque las imágenes parecen corroborar la existencia de una tregua momentánea, el sensacionalista »News of the World» apunta que hubo incidentes, aunque dirigidos a los fotógrafos.
Mientras Paul jugaba con su hija en brazos, Mills -quien actualmente filma todos sus encuentros con la prensa- increpó a un fotógrafo que quería sacar una instantánea y le dijo: «Voy a llamar a un asesino para que te mate, eres la escoria del mundo«.
Unos minutos más tarde, según el mismo periódico, el principal colaborador de McCartney, John Hammell, espetó al mismo fotógrafo: «No saques fotos de Paul, sólo de esa maldita perra«.
McCartney y Heather Mills están inmersos en una batalla legal por el divorcio recrudecida por unas supuestas afirmaciones de ella, filtradas a la prensa, en las que acusaba al músico de haber sido violento en ocasiones. Sin embargo, Mills ha anunciado que se querellará contra los dos periódicos que se hicieron eco de esas acusaciones, que «son falsas, perjudiciales e inmensamente ofensivas«.
El matrimonio de McCartney, de 64 años, y Mills, de 38, hizo agua el pasado mayo tras cuatro años de tormentosa relación, con la que, al parecer, nunca estuvo de acuerdo la hija mediana del músico, la diseñadora Stella McCartney. Según publicó ayer en portada »News of the World», Stella explotó en un ataque de rabia hace sólo unos días al leer en la prensa que Mills la había acusado de pegarle a su madre, Linda, fallecida de cáncer en 1998. La diseñadora, que tiene 34 años y está embarazada, se puso como loca durante una reunión en la casa familiar y, según el dominical, que cita a fuentes cercanas a la familia, le gritó a su padre: «Te dije que era una perra. ¿Por qué te casaste con ella? Desde el primer día ha sido una manipuladora. La zorra no estará contenta hasta que nos destruya a nosotros y los recuerdos de nuestra madre«.
Según el tabloide, Stella McCartney y Heather Mills se cayeron mal desde el principio y, después de la boda, en 2002, hicieron un pacto para no cruzarse la una en el camino de la otra.
Que bueno que el maestro encuentre descanso y alivio al estar con su nueva hija, un hijo es siempre una bendición,
Grande Paul…como siempre
Gracias por la noticia!