Los problemas del mural psicodélico de la entrada, y su posterior eliminación debido a una orden civil, lograda a punta de reclamos por parte de los vecinos sumados a las pérdidas en ventas causarían el cierre definitivo de la tienda Apple. Tras perder las conciliaciones por el mural de su fachada, Los Beatles deciden que cerrarían su boutique de la calle Baker #94… y deciden también que regalarían toda la mercadería sobrante.
A menos de un año después de haberse inaugurado, se anuncia públicamente lo que se veía venir. Las cuantiosas pérdidas se dieron desde el día uno de la inauguración de esta aventura de Apple Corps y Los Beatles.
George: «Si la hubieran protegido y hubiera una pared pintada allí hoy, estarían diciendo «Wow! Mira esto… debemos evitar que se descascare» pero eso es típico de las mentes cerradas contra las que intentábamos pelear, de eso se trataba todo el flower-power de los sesentas, de: «Lárguense, manga de gente aburrida». Todo el gobierno, la policía, el público, todos eran tan aburridos, y de repente la gente se dio cuenta que podían divertirse. Una vez que nos dijeron que debíamos deshacernos de la pintura, toda la cuestión empezó a perder su atractivo. Todos los eventos alrededor de la tienda Apple se estaban poniendo agrios y -como no estaba funcionando- decidimos venderla. Terminamos regalando los contenidos. Pusimos un aviso en el periódico y grabamos a la gente llegando y cogiendo todo«.
Poco antes de anunciarlo, los mismos Beatles entraron a tomar lo que les interesaba de la tienda, que habían abierto apenas el 7 de Diciembre del año anterior.
John (1972): «Fue un gran evento y todos los chicos vinieron y se llevaron todo lo que había en la tienda. Eso fue lo mejor que pasó en la tienda, cuando regalamos todo. Pero la noche anterior, nosotros mismos entramos y nos llevamos lo que queríamos. No era mucho, camisetas… fue genial, fue como robar. Nos llevamos todo lo que quisimos a casa.«
Como un último gesto, Paul McCartney usaría las ventanas de la tienda, ya cerrada, para publicitar el single «Hey Jude», pintando el título de la canción en blanco. En un principio, el gesto creó polémica, siendo interpretado por la comunidad judía como un graffiti antisemita («Jude» es el término germano que designa a los judíos), si bien al poco tiempo se explicaría el motivo de las pintadas.
El mánager de la tienda, Peter Shotton, se desplazaría a otros cometidos dentro de Apple Corps. La hermana de Pattie Boyd, Jenny Boyd, empleada en la tienda, se casaría posteriormente con el batería Mick Fleetwood.
Desde aquella noche, la gente ya armaba colas para obtener algo gratis fuera de la tienda.