Mark David Chapman vuela de regreso a Nueva York. En el vuelo lee un artículo en la revista Esquire firmado por Laurence Shames, en donde éste critica las creencias radicales de John y su exclusivo estilo de vida.
Una vez en Nueva York, el futuro asesino regresa al Dakota y el portero de 27 años del Dakota, Jay Hastings, le tiene que repetir varias veces que John y Yoko «estarán fuera de la ciudad durante toda la semana». Hastings, que ha trabajado en el edificio Dakota durante los últimos dos años, es un fan de toda la vida de Los Beatles y constantemente saluda a John y a Yoko cuando regresan tarde de las sesiones de grabación de Hit Factory. Cuando los Lennon regresaban tarde, John usualmente le decía: «Bonsoir Jay».