Se llevan a cabo los servicios para despedir a Linda McCartney, quien murió de cáncer de mama el 17 de abril a los 56 años. El evento termina trascendiendo además porque los 3 Beatles sobrevivientes se hicieron presentes. También lo hicieron Elton John, Sting y George Martin.
El servicio conmemorativo se llevó a cabo en la Iglesia de St.-Martin-in-the-Fields y fue la primera vez que Paul McCartney, Ringo Starr y George Harrison aparecieron juntos en público durante tres décadas.
Paul quería que el servicio fuera una celebración de su esposa, sin embargo, las multitudes alineadas en la calle aplaudieron y gritaron cuando Paul llegó flanqueado por familiares, amigos, compañeros Beatles y dos ponis Shetland llamados Schoo y Tinsel. A él se unieron sus hijos, Mary, Stella y James, junto con Heather, la hija del primer matrimonio de Linda.
Ringo Starr respondió a la multitud agitando su paraguas mientras entraba junto a su esposa Barbara. George Harrison, con la cabeza gacha, entró en la iglesia con un impermeable largo con capucha, dejando atrás a su esposa Olivia.
Paul habló ante los presentes en la iglesia: “Ella dijo un día ‘si pudiera salvar a un solo animal, eso es todo lo que me gustaría hacer’. Vi que se encendía una bombilla sobre su cabeza… y a lo largo de los años, se convirtió en la primera magnate vegetariana y tengo entendido que han vendido más de 400 millones de comidas. Así que ha salvado un par de animales ‘.
Los defensores de los derechos de los animales, algunos luciendo insignias de “Hazte Veggie por Linda”, llevaron a cabo una vigilia a la luz de las velas en Trafalgar Square, fuera de la iglesia, que estaba llena de lirios blancos, peonías y rosas por dentro.
El servicio comenzó con el estribillo del éxito de 1977 de Sir Paul “Mull of Kintyre”. El coro cantó “Celebration” de su composición clásica “Standing Stone”, que recientemente se convirtió en un álbum de mayor venta en ambos lados de el Atlántico. Los estudiantes del Instituto de Artes Escénicas de Liverpool, que Sir Paul ayudó a fundar en su ciudad natal, cantaron el suave estribillo de “Blackbird”. Finalmente, la congregación de 700 personas cantó Let It Be a la guía de Paul.
El fotógrafo de moda David Bailey leyó un poema del comediante Spike Milligan:
Fue el cielo. Tenías 7 y yo 8.
Y miramos las estrellas suspendidas
Caminando a casa por un carril de manzana
Rosie y yo, una muñeca, una cadena de margaritas
En una noche que nunca volvería.
Más tarde, Paul esparció las cenizas de su esposa sobre su propiedad familiar en el sur de Inglaterra. La pareja habría grabado seis canciones escritas por Linda poco antes de su muerte en Arizona. Hay planes para lanzarlas en un álbum tributo póstumo.
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