Según reveló al programa “Desert Island Discs”, de Radio 4 de la BBC, Yoko Ono estaba dispuesta a abortar cuando quedó embarazada del cantante John Lennon, pero dejó que él tomara la decisión final. Ono admitió que no estaba segura de tener al bebé debido a que atravesaban por una relación tormentosa.
Finalmente, Sean nació en 1975, porque Lennon dijo al final que sí quería tener al niño.
Ono, que ahora tiene 74 años, empezó su relación con el antiguo integrante de los Beatles en 1967 y dos años después estaban casados, pero Sean fue concebido tras una separación de dieciocho meses. “Sé que suena raro ahora, pero yo pensé, bueno, debería dejar que John decida si quiere tenerlo o no“.
Yoko admitió “Después de estar juntos otra vez, me quedé embarazada enseguida, y no sabía si era el momento correcto para tener un niño porque tal vez él no lo quería. No lo quería molestar con algo que no quisiese“. Sus declaraciones serán emitidas hoy, adelantó “The Sunday Times”.
Lennon incluso dedicó su tiempo a criar a su hijo y dejó de tocar la guitarra durante varios años. Además del caso del aborto, Ono habló de los primeros meses que conoció a Lennon. “Cuando empezamos a estar juntos, estaba aterrada de involucrarme, él era un Beatle.”
Ono revela que si se fuera a una isla desierta se llevaría la canción “Beautiful boy”, que Lennon escribió y cantó para su hijo Sean, y “Magic”, que cantó su hijo sobre la pérdida de su padre. Además, admitió que no se llevaría ninguna canción de los Beatles pero sí una historia china que le leían de pequeña.
Otro deseo, aunque más ambicioso, es poder vivir treinta años más.