El alcalde de Auckland es duramente criticado por haber planificado una «Bienvenida Cívica» para Los Beatles en los días previos, así que hoy se lleva a cabo una «Bienvenida Mayoral» para ellos. La semana anterior se había dado una «recepción cívica» para el coro Vienna Boys, sin mayor inconveniente, pero muchas autoridades del consejo veían a Los Beatles como «simples» rockeros que no ameritaban ningún tipo de recepción ni saludo cívico, por lo que el alcalde Robbie tuvo que hacerlo a título personal.
Alrededor de 7,000 fans se hicieron presentes en la ceremonia por lo que el ausentismo en las escuelas de Nueva Zelanda logró récords. Menos mal, no se suscitaron incidentes a pesar de la gran cantidad de fans presentes. John Lennon agradeció al alcalde con un «gracias, su adoración«. Finalmente, la jugada fue positiva para el alcalde, quien se hizo el favorito de la multitud joven.
Nuevamente, gracias a los gritos, se hizo demasiado difícil escuchar a Los Beatles en su concierto. Alrededor de las 8:00pm, una llamada de amenaza advertía que una bomba les sería colocada en su avión de la mañana siguiente.
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