Nuevamente, Brian Kelly contrató a Los Beatles para tocar dos veces el mismo día. Las tocadas fueron en el Aintree Institute y luego Neil Aspinall los llevó al Lathom Hall. Los Beatles habían estado habituados a usar transporte público para trasladarse hasta sus locales de actuación, pero dada la frecuencia de conciertos que habían logrado para esta etapa, Pete Best ofreció al novio de su mamá, Neil Aspinall a ser su «road manager» a tiempo parcial, en estos días, Aspinall consiguió comprar una vieja furgoneta gris con marrón marca Commer que le costó 80 libras, para acarrear los instrumentos de los cuatro Beatles. A la larga, Aspinall dejaría su trabajo de contador para convertirse en road manager permanente de la banda, ya que estaba ganando más dinero conduciendo para ellos.