La segunda presentación de los Beatles en Gales se dio en el Royal Lido Ballroom en Prestatyn, la ciudad natal de Neil Aspinall, con un set de dos horas. Tocó también Jack Ellis and The Autocrats. Antes de subir al escenario, el jefe de cocina del lido, Alan Veech, les dio a los Beatles un plato de bocadillos de mermelada.
Los boletos costaron seis chelines, y a Los Beatles se les pagó £30. Joe Flannery, un amigo cercano de Brian Epstein, fue responsable de reservar las bandas en el lugar; Los Beatles fueron el primer grupo que inscribió.
Una cláusula del contrato firmado el 29 de agosto, estipulaba que Los Beatles no podrían presentarse dentro de un radio de 10 millas del salón de baile en las 10 semanas previas al concierto.
El Royal Lido, que se denominaba «el mejor salón de baile del norte de Gales», se inauguró en 1960 y tenía una pista de baile de arce. Sería el lugar donde los Rolling Stones tocarían su primer concierto fuera de Inglaterra, el 31 de agosto de 1963. Años más tarde se restauró y cambió su nombre a Nova Center. La pista de baile fue removida y reemplazada por alfombra, pero el escenario permaneció.