Ringo viaja a Butlins, un campamento asentado en la Isla de Wight para empezar a filmar la producción de Goodtimes Enterprises de «That’ll Be The Day» para la Anglo-EMI. El film lo coprotagoniza David Essex, kien deja su actual rol como Jesus en el musical Godspell, Billy Fury, y Keith Moon, el baterista de The Who. Basado en un guión del escritor de Evening Standard, Ray Connolly, la filmación durará 7 semanas más y se completará el 14 de Diciembre (aunque Ringo completó sus escenas dos semanas antes de su regreso a su casa en Londres).
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