Después de un tiempo de defenderla, Paul está dispuesto a demoler la casa de madera sobre su predio en la comuna de Peasmarsh, en el sudoeste de Inglaterra.
McCartney desistió hoy de la lucha jurídica en torno a una casa erigida ilegalmente en el predio que comprende su lago privado, tras una larga disputa con las autoridades inglesas de planificación.
El músico de 64 años se mostró dispuesto a demoler la cabaña sobre su predio en la comuna de Peasmarsh, en el sudoeste de Inglaterra, indicó un portavoz de las autoridades. Se presume que la glorieta de la casa podrá ser mantenida en pie.
McCartney ya tiene suficientes temas legales a los que dedicarse por su amargo divorcio.