AIR Studios (Associated Independent Recording) en Londres, es una de las compañías de grabación más prestigiosas de la música rock. Fue fundado por George Martin, productor de los Beatles en 1969. Ahora se vende, aunque por una curiosa razón. Sus actuales dueños se sienten demasiado «viejos» para continuar con su gestión, sobre todo después de la disputa que han tenido con sus vecinos por una piscina.
El motivo de la venta es una larga disputa que han tenido los dueños con los propietarios de la parcela de al lado, los cuales tenían planeado construir una sala de cine y, sobre todo, una piscina a escasos metros de los estudios. Según sus dueños, estas nuevas construcciones podrían molestar e «interrumpir las grabaciones». Pese al apoyo recibido, la batalla minó la energía de sus propietarios, que tienen más de 70 años. Finalmente han decidido deshacerse de la compañía.
La venta será dirigida por London Bridge Capital e incluirá alrededor de 3,4 millones de euros en equipo de grabación, como por ejemplo una mesa de mezclas de época diseñada por el ingeniero electrónico Rupert Neve. «Queremos entregar el testigo como lo hizo Sir George«, ha declarado Richard Boote, que compró los estudios en 2006.
AIR Studios ha dejado una mella importante en el mundo del rock, aunque gran parte de su negocio actual se centra en bandas sonoras de películas de Hollywood, como por ejemplo Dunkerque o Interstellar, ya que es el único estudio en Londres, aparte del Abbey Road, que puede manejar una orquesta completa.
No obstante, en el pasado, y sobre todo en el AIR Studio de la isla caribeña de Montserrat (destruido por un huracán en en 1989), Elton John, The Rolling Stones, Black Sabbath o The Police grabaron en esta compañía algunos de sus discos más vendidos. La herencia de AIR también ha seguido atrayendo a artistas de rock y pop en la actualidad como Coldplay o Muse.