Se anuncia públicamente que Allen Klein es el nuevo manager de los Beatles, aunque Paul se negase a firmar el contrato. Para el momento del anuncio, Klein ya se encuentra instalado en las oficinas de Apple, ya expulsó ejecutivos, especuladores y estafadores. Ciertamente Apple dejó de perder dinero y Klein se avocó en maximizar las regalías para Los Beatles estableciendo récords… pero con un estilo muy particular.