Tras años de dependencia, Paul McCartney ha encontrado en su familia motivos suficientes para dejar la marihuana. Macca, quien incluso llegó a estar preso en Japón gracias al cannabis, comentó en una entrevista al Liverpool Echo que sus hijos y nietos tuvieron mucho peso en su decisión de dejar de fumarla.
Paul McCartney: «La última vez que fumé fue hace mucho tiempo… ¿por qué? lo cierto es que en esos días yo realmente no quería convertirme en un ejemplo para mis hijos y nietos… volviendo atrás yo solo era un chico en Londres y los niños eran pequeños, así que solo intentaba mantenerlo lejos de sus caras. Pero hoy creo que sí es una cuestión de no convertirse en un mal ejemplo… así que en lugar de fumar un porro, a partir de ahora me tomaré un vaso de vino tinto o una margarita«.
Fuente: Liverpool Echo