La marca alemana Höfner ha lanzado una campaña a través de las redes sociales, con la esperanza de recuperar información sobre el paradero del primer bajo de Paul McCartney, un Höfner 500/1 adquirido en la primavera de 1961, luego que Stuart Sutcliffe se fuera de la banda, mientras estaban contratados en el Club Top Ten. El bajo estuvo en producción únicamente durante menos de 4 meses y, por lo tanto, terminó siendo muy solicitado, sobre todo luego que McCartney lo popularizara. Fue utilizado por Paul durante dos años, incluyendo sus presentaciones en La Caverna y las primeras grabaciones de Los Beatles (Los álbums Please Please Me y With The Beatles y todos los singles y conciertos de entonces) hasta que en octubre de 1963, cuando Los Beatles estaban consagrándose, la compañía británica Selmer importó un nuevo Höfner para Paul.
El antiguo bajo necesitaba reparaciones, por lo que fue enviado a una empresa en Londres, a principios de 1964, que lo llevó a cabo. Lo vaporizaron con un sunburst más oscuro de 3 partes y colocaron nuevos botones. Lo más significativo es que crearon un marco de recolección único inusual para sostener ambas pastillas. Era muy distintivo, ningún otro bajo 500/1 se ve así. Paul mantuvo su bajo antiguo como un backup, utilizándolo en el videoclip Revolution y las sesiones de Let It Be… pero luego desapareció, a mediados de 1969. Se presume que fue robado.
«He tenido un Hofner desde que empecé. Tengo 3 modelos pero el antiguo sigue siendo mi favorito. Ha pasado por tanto trabajo que algunas partes están sostenidas con cinta adhesiva«.
Paul McCartney, Beat Instrumental (1966)
Ahora Höfner está utilizando el hashtag #tracethebass, la web hofner-guitars.com/lost-bass y el email thelostbass@hofner.com para dar con el paradero del bajo de Paul, sin prestar atención a teorías de conspiración sobre qué le ocurrió a este instrumento.
Nick Wass (Gerente de Marketing de Höfner): «Alguien, en algún lugar, sabe lo que sucedió con este bajo y alguien sabe si todavía existe y dónde está ahora. Esta información está disponible si solo alguien la proporcionara. Creemos firmemente que es hora de que este bajo regrese a su propietario, Paul McCartney, si aún existe. Es un instrumento tan importante que todos merecemos volver a verlo«.