El abogado de Yoko Ono informó ante un juez federal en Nueva York, que la artista ha llegado a un acuerdo con Fred Seaman, ex asistente de John Lennon, y a quien habría retirado la demanda por infracción de derechos de autor.
El acuerdo pone fin a 20 años de litigio en los que Seaman debía pagar a Ono una determinada cantidad de dinero y estaba prohibido de hablar de John Lennon. Como leía la sentencia entonces, «Seaman no puede hacer declaraciones a un tercero sobre o en relación con John Lennon individualmente o como miembro de Los Beatles, Yoko Ono Lennon o Sean Lennon que no sea una discusión entre abogado y cliente«.
La publicación, sin embargo, no cierra en muy buenos términos: «Que Seaman es un malhechor y un promotor de sí mismo es incontrovertible: su primer instinto después del horrible asesinato de John Lennon fue robar a la familia Lennon con el propósito de ganar fama y fortuna al explotar un status de celebridad autocreado. No solo se beneficiaría económicamente de la muerte de Lennon, sino que también difamaría a la Sra. Lennon y trataría falsamente de presentarse a sí mismo como el único confidente verdadero de Lennon al realzar falsamente su condición de chofer. Todo ha acabado, mal o bien, según se mire«.
En febrero del 79′, Seaman fue contratado para trabajar con los Lennon. Sin embargo, tras la muerte de John, su ayudante se habría quedado con algunas pertenencias del músico e incluso habría tentado emitir una publicación.